Todas las cuerdas EDELRID cumplen con los más altos estándares de calidad y seguridad. Cada metro ha sido fabricado y terminado con sumo cuidado. Nuestras cuerdas son sometidas a rigurosas pruebas. Están preparadas de la mejor manera posible y listas para ser utilizadas en todo el mundo.

Cuando compras una cuerda EDELRID, nuestro trabajo ha terminado; la cuerda pasa a ser tu responsabilidad y comienza una gran aventura. Existen algunas reglas básicas que todo escalador debe seguir para sacar el máximo provecho de su cuerda. Es importante no olvidar que una cuerda es, esencialmente, un producto textil y debe ser cuidada y utilizada en consecuencia. Aquí tienes algunos consejos prácticos para cuidar tu cuerda.

 

DESENROLLADO

La mayoría de las cuerdas se enrollan y empaquetan antes de salir de la fábrica. Por eso, es importante desenrollar cuidadosamente tu cuerda cuando la extraigas del paquete para revertir este proceso. Si no lo haces, podrías acabar con torsiones y dobleces no deseados.
Para desenrollar la cuerda, retira cuidadosamente las cintas de seguridad, pasa tus antebrazos por el centro del rollo y luego tira de ellos para que la cuerda forme un anillo. Manteniendo la tensión en los rollos, gira lentamente tus antebrazos alrededor uno del otro para desenrollar con cuidado la cuerda en una pila en el suelo. Ten cuidado de que no se envuelvan bucles alrededor de tus muñecas. Una vez que toda la cuerda esté desenrollada, pásala dos o tres veces y sacúdela para eliminar los últimos giros o dobleces. Cuando termines, enrolla la cuerda o, aún mejor, guárdala suelta en una bolsa para cuerda. Es mejor realizar todo el proceso en interiores o sobre una bolsa para cuerda, para asegurarte de que permanezca libre de suciedad.

ENROLLADO

El enrollado es la mejor forma de transportar tu cuerda si no tienes una bolsa para cuerda. Mantiene tu cuerda limpia y almacenada de manera práctica. Aprender a enrollar bien la cuerda lleva un poco de tiempo. Aquí tienes algunos consejos a tener en cuenta. En primer lugar, no importa realmente si enrollas la cuerda desde el centro doblada por la mitad o desde los extremos. También se puede enrollar como una sola hebra desde un extremo. Lo importante es enrollarla en bucles y no en anillos como si fuera un cable. La forma más fácil de hacerlo es recoger los bucles con una mano o colgarlos alrededor de tu cuello alternando hacia la izquierda y la derecha.

Las bolsas para cuerda son la mejor manera de almacenar y transportar tu cuerda. Ofrecen mucho espacio, se pueden guardar de manera compacta y tienen una lona para proteger la cuerda de la suciedad y la humedad. Ata un extremo de la cuerda a un lazo de sujeción en la esquina para evitar que el extremo pase inadvertidamente por el asegurador al descender. Luego pasa la cuerda por tus manos y apílala en bucles sobre la lona. El escalador líder puede atarse al extremo libre. Cuando termines, ata el extremo libre al segundo lazo de la lona, enrolla la cuerda y asegúrala en la bolsa para cuerda.

Si no tienes intención de usar tu cuerda durante un período largo o durante el invierno, es importante almacenarla adecuadamente. Lo ideal es guardarla en un lugar seco, oscuro y fresco, y no en un recipiente cerrado. La mejor forma de hacerlo es en una bolsa para cuerda o bien enrollada de forma correcta y alejada de la luz solar directa, productos químicos, calor y cualquier fuente de daño mecánico. No cuelgues la cuerda por uno de sus bucles. Guardar una cuerda permanentemente en el maletero del coche no es una buena idea. Podría estar expuesta a grandes fluctuaciones de temperatura e incluso a productos químicos dañinos.

EDELRID es conocida por sus cuerdas innovadoras, con los más altos estándares de calidad y seguridad. Hemos preparado algunos consejos básicos sobre el cuidado de cuerdas para que puedas disfrutar de tu cuerda de escalada durante mucho tiempo. La segunda parte del artículo trata sobre cómo revisar la cuerda de escalada en busca de daños, la correcta limpieza de una cuerda de escalada y proporciona información general sobre la vida útil de la cuerda. Si tienes alguna pregunta sobre cómo enrollar y desenrollar una cuerda o sobre la forma correcta de almacenarla, encontrarás respuestas en la primera parte del artículo.

 

INSPECCIONAR TU CUERDA

Las cuerdas de escalada están hechas para ser usadas. Sin embargo, cada ruta que escalas deja su huella. Por esta razón, debes inspeccionar cuidadosamente tu cuerda antes y después de usarla. Además de una inspección visual, es importante pasar la cuerda por tus manos, metro a metro. Esto te permitirá detectar cualquier irregularidad pequeña o signo de daño. En caso de un incidente grave (por ejemplo, caída de piedras, gran caída), debes prestar especial atención al revisar tu cuerda.

No puedes evitar que tu cuerda se ensucie (especialmente si no usas una bolsa para cuerda). Esto no es un problema y ciertamente no significa que debas reemplazarla. Una cuerda es un producto textil y puede lavarse. Si tu cuerda está realmente sucia, lavarla mejorará su manejo. Utiliza un detergente sintético suave de un minorista especializado. La mejor manera de lavar tu cuerda es a mano con agua tibia. El ciclo para ropa delicada (30°C) en la lavadora también está bien. Es importante: no uses el ciclo de centrifugado y nunca pongas la cuerda en la secadora. Para secar tu cuerda, no la cuelgues y evita la exposición directa al sol. La mejor forma de secarla es extenderla en el suelo en un lugar fresco y oscuro.

VIDA ÚTIL

Las cuerdas se deterioran incluso cuando no se usan. Al menos, deben reemplazarse después de diez años, ya que las fibras sintéticas se deterioran con el tiempo. Una cuerda que solo se usa ocasionalmente y se guarda con cuidado puede durar entre tres y seis años. Si usas tu cuerda con mucha regularidad y recibe muchas caídas, te aconsejamos que la bajes a un uso de "top rope" solo después de un año. No es posible proporcionar valores exactos para la vida útil de una cuerda. En particular, un manejo difícil o una funda desgastada deben dejar claro al usuario consciente de la seguridad que es hora de reemplazar la cuerda. Es importante reemplazar la cuerda si ha estado expuesta a fuerzas extremas o si está dañada. Por ejemplo, si:

  • hay abultamientos axiales y/o radiales significativos o deformaciones (por ejemplo, secciones rígidas, cortes, esponjosidad)
  • la funda resbala significativamente
  • la funda está extremadamente desgastada (por ejemplo, abrasión o deshilachado)
  • el calor, la abrasión o las quemaduras por fricción han derretido o dañado visiblemente la cuerda
  • la cuerda ha estado en contacto con productos químicos, en particular ácidos.